domingo, 4 de mayo de 2008

Sueño

Un hombre apareció andando;
seguía, seguía, siguiendo iba,
y el oscuro pasadizo se extendía,
como dos carros a la carrera

Y sin darse cuenta de nada,
el túnel era un misterio,
el pequeño se hizo grande,
¿lágrimas o risas?

La lluvia era negra,
la casa se hacía cenizas,
y la bestia aparece,
pero el sigue, el miedo no existe

A paso firme, pero sin rumbo
¿Por qué caminas? No quiero,
solo sé que debo caminar,
porque al final todo termina


Fernando Peñaranda Carbone